La transfobia nos mata. Todos somos Alan
El domingo 27 de Diciembre, miles se concentraron en las principales ciudades del Estado español ante la muerte de Alan, un joven transexual que se suicidó a consecuencia del bullying sufrido en el instituto.
Después de que el viernes pasado conociéramos la noticia de que Alan, el menor transexual de 17 años, se suicidó el pasado 25 de Septiembre en Cataluña debido a la presión social y al acoso escolar que sufría en el instituto, la asociación Chrysallis, que agrupa a familias de menores transexuales, convocó actos contra la transfobia en una decena de ciudades bajo la consigna “La transfobia nos mata. Todos somos Alan”.
Centenas de personas se unieron en Barcelona, Madrid, Valencia, Zaragoza, Las Palmas, Burgos o San Sebastián alrededor de banderas, velas y fotografías expresando silenciosamente toda la rabia y la indignación que ha provocado la injusta muerte del joven. En un luto silencioso en repudio a la transfobia y el acoso, se leyó el manifiesto en el que se denuncia la violencia que todavía sufren las personas transexuales.
Alan sufrió el rechazo de sus compañeros y compañeras de clase, algo que se acabó convirtiendo en un dolor insoportable, hundiéndolo en una grave depresión que le obligó a estar hospitalizado.
Los portavoces de la asociación que leyeron el manifiesto denunciaron el daño producido por la discriminación social y la desprotección por parte de las instituciones, en las hay más trabas que facilidades para reconocer legalmente la identidad de las personas transexuales. Algo todavía más complicado en el caso de menores-.
De hecho, Alan había sido uno de los dos primeros transexuales menores de edad que habían conseguido modificar su nombre en el DNI en Cataluña, aunque en el documento seguía constando su sexo como femenino sometiéndole diariamente “a una exposición pública de su situación de transexualidad” en todos los ámbitos de la vida diaria, como ha explicado una de las portavoces de Chrysallis.
En Barcelona, el Observatorio contra la Homofobia ha realizado también una petición al Síndic de Greuges para que se investiguen los motivos que empujaron a Alan al suicidio, exigiendo que se esclarezca si se habían activado los recursos necesarios en el instituto del joven. Su portavoz, Eugeni Rodríguez también ha denunciado que la ley contra la LGTBfobia aprobada recientemente en Cataluña no se está aplicando correctamente, y ha remarcado también la necesidad de que en los colegios se apliquen protocolos adecuados para enfrentar la homofobia tal y como propone la ley.
